EU repatria en 13 años a 36 mil dominicanos

Más de 36,000 dominicanos han sido deportados desde 1996, cuando el presidente Bill Clinton firmó la Ley de Reforma de la Inmigración Ilegal y la Responsabilidad Inmigratoria (IIRAIRA), y los dominicanos constituyen el 25% de la población carcelaria en el estado de Nueva York.
Las cifras corresponden al informe “Deportado, dominicano y humano”, realizado por la Coalición del Norte de Manhattan para los Derechos de los Inmigrantes (NMCIR), en colaboración con la Clínica de Derechos de los Inmigrantes de la Facultad de Derecho de la Universidad de Nueva York.
Los dominicanos son deportados en su mayoría por haber cometido delitos, en muchas ocasiones menores, incluso sucedidos hace muchos años y en gran parte relacionados con el tráfico o el consumo de drogas.
Estas deportaciones afectan profundamente a Washington Heights, el vecindario del norte de Manhattan donde se concentra el mayor número de dominicanos en la ciudad, y que el informe califica como “la Zona Cero de las deportaciones”.
Más de un millón de dominicanos viven en EE.UU., según datos facilitados por NMCIR y basados en el Censo. Un total de 617,901 residen en el estado de Nueva York y hay 554,638 viviendo en la ciudad, de los que se estima unos 200,000 en Washington Heights. Nueva Jersey es el segundo estado con más dominicanos con 136,529.
“A diferencia de otros grupos de inmigrantes, muchos dominicanos deportados son residentes permanentes y han vivido en este país una media de 20 años”, dijo Connie Tse, de la Clínica de Derechos de los Inmigrantes ayer.
Ryan Shanovic, igualmente de la Clínica, denunció que no se está siguiendo el proceso debido en las deportaciones y una vez en República Dominicana son discriminados. “Se enfrentan al estigma que un deportado criminal tiene y los únicos que los emplean son empresas estadounidenses”, aseguró.

Cierran siete discotecas violan horario bebidas

La Secretaría de Interior y Policía dispuso hoy el cierre, durante 60 días, de varios establecimientos de expendio de bebidas alcohólicas, entre ellos la discoteca Praia, por violar el límite de horario establecido para el funcionamiento de esos negocios.
Además de Praia, ubicada en el ensanche Naco, la medida afecta a la 911 Night Club, del ensanche La Fe, y el bar Mozart, de Boca Chica.
Por espacio de 30 días estarán cerrados también los colmados Doble XX y Triple XXX, en Los Alcarrizos; el bar pizzería Sofía y el centro de bebidas Drink Club, de la prolongación avenida Venezuela, en Santo Domingo Este, informó Henry Castellanos, director del programa de Control de Bebidas Alcohólicas (Coba), de Interior y Policía.
Destacó que previo al cierre de esos establecimiento, a sus administradores se les notificó varias veces de que estaban violando las disposiciones contenidas en los decretos 308-06 y 316-06, que establecen que los negocios de bebidas alcohólicas que sólo pueden estar abiertos al público, de domingo a jueves hasta las 12 de la medianoche, y de viernes y sábados hasta las 2:00 de la madrugada.
Informó que a nivel nacional hay 179 establecimientos de expendio de bebidas alcohólicas, incluidas discotecas, a las que se les está permitiendo operar una hora más del horarios regular, decisión que dijo se adoptó tras una categorización que se hizo tomando en cuenta los estándares de seguridad e higiene que exigen Salud Públicas y los cuerpos de bomberos.
Dijo además, que hay 151 negocios de ese tipo que tienen un día excepcional a la semana, que se les permite operar hasta las 4:00 de la mañana.
Explicó que esa medida data del 10 de junio de 2008.
El Coba convocó hoy a una rueda de prensa, a propósito de que El Nacional publicó ayer una información, dando cuenta de que numerosas discotecas estaban operando fuera del horario establecido, en violación a las disposiciones del Poder Ejecutivo.
Castellanos prometió entregar próximamente la lista completa de las discotecas autorizadas a operar una hora más del horario regular, así como a las que se les permite ampliar el horario un día a la semana.
Dijo que a otros establecimientos a los que no identificó, las autoridades decidieron cerrarlos al comprobar que fueron escenario de tragedias en su interior, y otros que intranquilizaban el vecindario donde operaban.
La restricción del horario de expendio de bebidas alcohólicas fue adoptada para enfrentar una oleada de crímenes y violencia que afectaba al país en el 2006.